Méhari, el eterno hippie cumple 50 años
La marca lanza el Art Car E-MEHARI

Méhari es símbolo de libertad. De coger el coche sin importar hacia dónde, de melena al viento y de música a todo volumen. De verano, de escapar de la ciudad, de llenar el coche de arena y de despreocupación, principalmente de despreocupación. No podía ser de otra forma viniendo de un coche que nació en mayo del 68, en París. Medio siglo después, Citröen ha sabido mantener en Méhari sus valores inconformistas. Hace dos años, la marca lanzó el E-MEHARI y ahora, para celebrar su 50 cumpleaños, la marca le da otra vuelta al asunto; el Art Car E-Mehari, es el modelo exclusivo creado por el diseñador Jean-Charles de Castelbajac que acaba de lanzar. Repasamos la historia de un icono hecho coche.
Era mayo del 68 y los estudiantes franceses salían a la calle para rebelarse contra los cánones de la sociedad del consumo. Buscaban transformaciones, buscaban libertades, buscaban cambiar el mundo. Y en ese contexto nacieron muchas otras revoluciones, una de ellas en forma de coche. Ese 11 de mayo se presentó en Deauville, la recurrida costa de Normandía, un coche que se convertiría en el aliado perfecto de esos aires sediciosos: el Méhari. Le robaba el nombre a un tipo de dromedario del Sáhara, tenía la carrocería de plástico, colores llamativos y un techo descapotable prácticamente desde la cintura. Y así nació un icono.
Lo que vino después ya lo sabéis de sobra. Mehari se ganó con creces el éxito popular y el fenómeno comenzó a crecer ya no como coche, sino como símbolo. Gran parte de su fama se la debe a su carrera cinematográfica que lo hizo víctima de series como ‘El Gendarme de Saint-Tropez’, de numerosos raids y de múltiples anuncios publicitarios (Tonight, tonight…). Su producción terminó en 1987 e hicieron falta casi 20 años para que Citröen desvela el nombre de su heredero: a finales de 2015 se lanza el E-Mehari. Un modelo con los mismos ideales, renovado, divertido, y, por supuesto, 100% eléctrico (¿cómo iba a ser si no el Mehari del siglo XXI?).
Y aquí viene la tercera parte de la historia. Méhari sigue renovándose. Acaba de cumplir 50 años y ha querido celebrarlo por todo lo alto creando el Art Car E-MEHARI, en colaboración con el diseñador Jean-Charles de Castelbajac. Continua la revolución, continúan los colores y continua la libre expresión. Esta vez con un atrevidísimo modelo un tanto optimista, muy pop y crómatico hasta la medula. Rojo de revolución, amarillo por su entusiasmo y azul por los horizontes ecológicos, esta obra de Castelbajac está repleta de signos en honor a la libertad y de estímulos creativos.
Parece que al eterno hippie le queda aún vida para largo.
Tendencias TV Selection

Lisboa, entre lo Sublime y lo Infame
Lo que de entrada podría parecer un gran overpromise empieza sorprendiéndome como un grandísimo pistoletazo de salida para descubrir Lisboa. Sublime Hotel, con ese nombre entenderéis que las expectativas sean más que menos. Situada...

Hoteles que en vez de camas ofrecen mucha historia y territorio
CAN MASCORT, UN ESPACIO DE EQUILIBRIO, ARMONÍA Y SALUD. Can Mascort EcoHotel es un espacio inaugurado hace apenas tres meses y creado siguiendo los criterios de bioconstrucción. La Bioconstrucción (que...

Mas Falgarona, paisaje y entorno vivo en estado puro
Mas Falgarona es un edifico histórico datado del s.XVII, reformado como Hotel Boutique & SPA de 15 habitaciones en el corazón del Alt Empordà. Un hotel de carácter rústico con...

Nomading Camp: ¿Un hotel o una cápsula del tiempo?
Conectar con un lugar, con una persona o con un instante y querer “detener el tiempo”. ¿Te resuena? Nos empeñamos en encontrar ocasiones extraordinarias en vez de detectar esos momentos...

Desert Women Summit
Este año hemos podido asistir al Desert Women Summit, una aventura inmersiva para mujeres en el desierto de Marruecos. Un encuentro lleno de diversión, movimiento, compañerismo y aventura. Una experiencia...

Cuando la sostenibilidad llega a los hoteles
Hay muchas maneras de entender el lujo hoy, pero sin duda, la sostenibilidad y el bienestar son partes de este todo. La contemporaneidad llama a la naturaleza, a lo relajado...